El iluminador esa herramienta que nos permite darle el remate final a nuestro maquillaje para que luzca ideal.
Como su propio nombre indica su función principal es iluminar el rostro para que tu look luzca radiante, pero también natural. Muy importante.
Las técnicas de maquillaje más utilizadas tienen dos objetivos principalmente, dimisular las imperfecciones y resaltar los puntos más bellos del rostro.
Aquí entra el iluminador para dar luz y hacer sobresalir a esas zonas de la cara que quieres destacar.
Lo más recomendable para explotar todas las cualidades de un iluminador es aplicarlo tras haber utilizado tanto la base de maquillaje como los correctores sobre tu rostro.
¿Dónde aplicamos el iluminador?
Para aquellas que tienen una piel más grasas es importante prestar más atención a la zona que comprende la frente, nariz y barbilla, para eliminar los brillos no deseados.
Por norma general el iluminador debe utilizar sobre cejas y párpados para resaltar los ojos. En los pómulos si queremos destacar las mejillas. Sobre el tabique nasal y en la punta de nariz para dotarla de un toque especial.
¿Qué tono utilizamos?
Como ya sabrás según el tipo de piel es más recomendable el uso de uno u otro color de iluminador.
Para las pieles más claras son ideales los tonos rosados o blancos tanto para los pómulos como los labios y, las tonalidades doradas encima de los ojos.
Del mismo modo puedes utilizar esos colores de iluminador si tu piel tiene una tonalidad intermedia. Nunca está de más aplicar el bronce en esas zonas
Por último para las pieles más oscuras os recomendamos tonalidades doradas y rosas, así como el blanco para la zona de las cejas y labios.
Si necesitas un maquillaje para sorprender en estas fiestas que se avecinan o en cualquier evento tienes que probar nuestro amplio catálogo de servicios.
